Cuando hablamos de 'la nube', tendemos a hablar de ella en términos de tecnología bastante fundamentados, principalmente su impacto en la forma en que accedemos a nuestros datos y nos comunicamos entre nosotros..

Al adoptar tecnologías basadas en la nube, las empresas están dando a sus empleados una mayor flexibilidad, cambiando dónde, cuándo y cómo trabajan.

Pero esto solo da una consideración superficial al impacto real en las formas en que trabajamos. Seguimos hablando de los empleados en cuanto a su relación con el lugar de trabajo y los dispositivos, y se supone que seguiremos trabajando de la misma manera, solo desde diferentes lugares y en diferentes momentos.

Tu lugar de trabajo es donde eliges trabajar

El lugar de trabajo todavía se considera sinónimo del propio negocio; Cada negocio tiene una oficina, una sede. Los empleados pueden tener la libertad de pasar menos tiempo allí, pero es difícil dejar de pensar que el lugar físico es, de alguna manera, el negocio en sí..

Sin embargo, todo buen líder empresarial sabe que una organización no está hecha de ladrillos y cemento, sino de personas. Así que creo que pensar en trabajar en la nube es absurdo no trabajar fuera del lugar de trabajo. Dondequiera que elija trabajar es el lugar de trabajo y su fuerza laboral es su negocio..

Fuerza de trabajo basada en la nube, no empresas

Aquí es donde entran en juego las ideas de la nube humana. Dentro de diez años ya no estaremos hablando de negocios basados ​​en la nube, sino de fuerzas de trabajo basadas en la nube..

Los empleados no estarán vinculados de alguna manera a un dispositivo, escritorio, oficina o país. Todo eso será redundante o incidental; La fuerza de trabajo de la nube humana será el propio negocio..

En este nuevo mundo de negocios, los empleados trabajarán desde cualquier ubicación, en cualquier dispositivo y se moverán sin esfuerzo entre aplicaciones, herramientas y documentos dentro de su propia "nube"..

Conectividad y comunicaciones fiables.

Por supuesto, para que esto se convierta en un caso, existe una gran confianza en la tecnología para ofrecer conectividad y comunicaciones altamente confiables. La infraestructura debe estar implementada para permitir a los empleados acceder a todo en su nube personal con solo tocar un botón.

Las comunicaciones deberán ser tan fáciles como inclinarse sobre un escritorio para hablar con alguien, y ser lo suficientemente confiables para que los empleados sepan que pueden comunicarse con cualquiera de sus clientes o colegas con la facilidad que puedan..

Suponiendo que esto se convierta en realidad, el espacio físico de la oficina tendrá una función y un significado completamente nuevos. Los empleados ya no entrarán a la oficina para 'trabajar' en el sentido tradicional; Será un espacio de colaboración, reuniones y debates..

De hecho, en la era de la nube humana, las empresas pueden no necesitar direcciones físicas fijas en absoluto. El espacio y el tiempo para colaborar, reunirse y discutir podrían ser más transitorios, reservados simplemente en función de lo que se requiera y cuándo..

  • Graham Bevington es el Vicepresidente Ejecutivo de Mercados Internacionales en Mitel. Graham es responsable del crecimiento y el éxito de Mitel en todas las regiones no norteamericanas, incluidas EMEA, APAC y CALA. Graham tiene más de 25 años de experiencia en la industria de alta tecnología en puestos de administración y ventas..