Ya hay muchos robots de apariencia dura diseñados para ir a lugares donde los humanos no se atreven a aventurarse, por lo que es un cambio agradable encontrar un hombre de metal diseñado para ser amable con la gente y hacer la vida un poco más placentera..

Ri-Man es un robot de cuidado de 158 cm desarrollado en Japón por el Centro de Investigación de Control Bio-Mimético en la agencia gubernamental RIKEN. La máquina de 100 kg es única porque está cubierta con una suave silicona verde para que sea cálida al tacto y suave..

Piel sensible

El motivo del exterior amigable para el usuario radica en el hecho de que el futuro papel de Ri-Man lo llevará a levantar a los pacientes en cama o discapacitados para que los lleven a sus hogares, hospitales o centros de rehabilitación. Debajo de esa funda de silicona hay más de 300 sensores y diminutos motores que controlan la fuerza con la que está presionando la carga útil humana y ajustan la tensión de la piel en consecuencia para que el viaje sea más cómodo.

Naturalmente, Ri-Man también tiene todas las habilidades que esperamos de los robots normales, incluidos los ojos de las cámaras de video, el reconocimiento facial y los micrófonos para los oídos, aunque no esperábamos que hubiera sido bendecido con un sentido del olfato también. Los creadores de la máquina agregaron una nariz que detecta olores para permitirle detectar aromas como el gas y la orina humana, lo que definitivamente es el primero para cualquier robot que conozcamos..