Prepárate para un futuro donde casi todo es eléctrico..

Los investigadores de la Institución de Investigación Fraunhofer para Sistemas Electrónicos Nanos han desarrollado baterías que son baratas, súper delgadas y flexibles..

Las nuevas baterías de zinc-manganeso pesan menos un gramo, tienen menos de un milímetro de grosor, lo que significa que pueden caber en algo tan pequeño como una tarjeta de crédito.

Tarjetas que te hablan

Las tarjetas bancarias con alimentación podrían incorporar encriptación súper fuerte o incluso pantallas en miniatura para mostrar su saldo con solo tocar un botón.

Las baterías se imprimen utilizando un método de serigrafía similar al que se usa para las camisetas, colocando capas de ánodos y cátodos que son tan delgados como un cabello humano..

El proceso es lo suficientemente barato como para que las baterías deban costar alrededor de 5 peniques y los investigadores ya han producido las baterías a escala de laboratorio..

Sin embargo, debido a que los electrodos se disipan gradualmente mientras generan energía, las baterías imprimibles tienen actualmente una vida útil limitada. Los científicos esperan tener baterías comercialmente viables listas para fin de año..